Los ecocidios cometidos durante décadas a través del daño y la destrucción masiva de ecosistemas han catalizado la crisis ecológica y climática actual. El daño ambiental y la pérdida de biodiversidad a escala global, resultado de actividades humanas irresponsables, continúa creciendo a un ritmo vertiginoso a pesar del conocimiento de sus riesgos por parte de empresas, gobiernos y el resto de actores responsables. Esta situación pone en riesgo nuestro futuro y el de millones de seres vivos más, y debilita la base física y biológica que sostiene la vida al planeta.

Por la seguridad de nuestra generación y de las generaciones futuras, es responsabilidad tanto de la ciudadanía como de las entidades sociales, sector privado y  instituciones públicas de nuestro país preservar los espacios naturales y servicios ecosistémicos que sustentan nuestras vidas. Del mismo modo, es nuestra responsabilidad la de velar para que la huella ecológica de nuestra economía no comporte ninguna destrucción o grave daño ambiental.

Los actuales tratados, acuerdos y ordenamientos jurídicos estatales internos no prevén la corrección o compensación del crimen de ecocidio. A pesar de las continuas demandas de la sociedad civil, la destrucción de la naturaleza queda impune de forma reiterada. Hay que cambiar las reglas para acabar con la impunidad. Es urgente crear una norma internacional que prohíba y sancione penalmente causar daños masivos en nuestro planeta.

En los últimos tiempos se han producido adelantos muy significativos al respeto en la esfera política internacional. Varios países como Francia, Bélgica, Vanuatu y las Maldivas ya se han comprometido a apoyar a la enmienda en el Estatuto de Roma por la incorporación del crimen de ecocidio. Hace tan solo dos semanas, el Parlamento Europeo apoyó firme a esta iniciativa a través de la aprobación de dos informes clave. También son numerosas las figuras públicas internacionales que apoyan al reconocimiento internacional del crimen de ecocidio.

Teniendo en cuenta todo el anterior, las entidades que firmamos este manifiesto nos dirigimos a las fuerzas políticas democráticas del Parlamento de Cataluña con la finalidad que aprrueben la “Propuesta para presentar a la Mesa del Congreso de los Diputados la Proposición de ley de modificación de la Ley del Estado 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, para reconocer a nuestro ordenamiento legal el crimen de ecocidio y apoyar a la iniciativa dirigida al Estatuto de Roma para incorporarlo al Tribunal Penal Internacional”.

Firma el manifiesto en la web prouecocidis.cat