Lunes, 18 de marzo de 2024 

Casi 140 grupos internacionales de defensa de los derechos humanos, que a su vez representan a centenares de abogados defensores de derechos humanos, han presentado un nuevo escrito amicus curiae a los tribunales federales de Estados Unidos para que obliguen al gobierno de Joe Biden a rendir cuentas por su inacción -e incluso, complicidad- en el genocidio que el estado de Israel estaría cometiendo contra el pueblo palestino de la llamada Franja de Gaza. El escrito, presentado por el prestigioso Centre for Constitutional Rights de Nueva York  se suma al ya presentado en enero, coincidiendo con la demanda de Sudáfrica contra Israel en el Tribunal Internacional de Justicia y en el que el Observatorio DESCA, como parte de la red de la Red de Abogadxs de Movimientos Sociales (Movement Law Lab), participó activamente. Desgraciadamente el primer escrito fue desestimado por el tribunal porque consideró que este caso afectaba a asuntos estrictamente políticos del gobierno norteamericano y no tiene competencia para juzgarlos. Este nuevo amicus curiae retoma el caso y le da al tribunal cuatro argumentos de por qué Estados Unidos debe rendir cuentas por sus acciones (e inacciones) sobre la invasión y bombardeo de Israel sobre Gaza: 

• La ley contra el genocidio es una de las más importantes del sistema legal internacional: La Convención contra el Genocidio codifica la norma internacional en la prohibición del genocidio. Ningún estado puede tomar una decisión política que viole sus obligaciones para con la normativa internacional.
• La justiciabilidad del deber de los Estados Unidos en prevenir, y no ser cómplice, de un genocidio: Los tribunales han sentado una robusta jurisprudencia en lo que a genocidio se refiere y deben ser aplicados por el tribunal federal, en este caso.
• Los tribunales locales son el lugar apropiado para reforzar la prohibición del genocidio: Ya que EEUU ha frenado cualquier intento de aplicación de esta normativa por parte de los tribunales internacionales, los tribunales federales norteamericanos son el único lugar donde esta normativa tan importante puede aplicarse. El escrito hace referencia a la reciente prohibición al gobierno de los Países Bajos, por parte de un tribunal holandés, de exportar partes del avión de combate, como ejemplo de cómo los tribunales locales deben abordar el asunto.
• La contribución de Estados Unidos a la erosión de los principios fundamentales de la ley internacional: si el gobierno norteamericano no rectifica sus acciones ésta negligencia podría dañar los principios de aplicación de la ley internacional. Las acciones e inacciones de EEUU podrían reforzar a otros países para que no se tomen en serio las normas internacionales, con el consiguiente riesgo para las minorías sociales y los pueblos oprimidos en todo el mundo, además de pervertir los intereses estratégicos y morales del país norteamericano.

“Hace 75 años los Estados Unidos ayudaron a escribir la Convención contra el Genocidio y la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El país jugó un papel crucial para la implementación de las leyes que debían proteger a la gente de los terribles crímenes que tuvieron lugar en la Segunda Guerra Mundial, tales como el genocidio” argumenta Meena Jagannath, una de las autoras del amicus curiae y coordinadora de la Red de Abogadxs de Movimientos Sociales. “Si los Estados Unidos no hacen nada para evitar lo que otros tribunales han determinado como posible genocidio, esto podría afectar negativamente a las normas que hace años se diseñaron para mantener la paz y la seguridad a nivel mundial”.

Miguel Ruiz Díaz-Reixa, miembro del Observatorio DESCA, abogado e investigador especializado en derechos humanos, enfatiza la importancia de la responsabilidad moral a nivel global: “Detener el genocidio en Gaza y prevenir futuros genocidios es la esencia de nuestra moral como seres humanos. No evitarlo implica estar dando pasos hacia el mismo abismo que la comunidad internacional trató de prevenir después de la Segunda Guerra Mundial”.

Enmedio de la escalada del conflicto en Gaza, observadores internacionales y organizaciones de derechos humanos han alertado de la crisis humanitaria desatada en la zona y la violación de la ley internacional por parte de Israel. Un extenso informe de Human Rights Watch aporta detalles sobre la situación en la que el bloqueo de Gaza ha limitado el acceso de la población a bienes y servicios básicos como comida, agua o luz, haciendo un crudo retrato de la situación que sufren miles de personas, muchas de ellas niños y niñas.